Joven madre boliviana
Inteligente y amable
Experta en cuidar ancianos
Con cariño y con detalle.
Con su marido y su hijo
Luchan por su porvenir
Merecen trabajo fijo
Para poder subsistir.
Tiene un hijo adolescente
Que responde por Xaúl
Y tiene siempre presente
Su porvenir y salud.
De los valles y Las Yungas
Del boliviano altiplano
Vinieron a las tahullas
De agricultores murcianos.
En la historia de Bolivia
Hubo lejanas culturas
Yo sólo tengo noticias
De la “Aimara” y la “Quechua”.
Cuando veo el dominó
Se aviva en mi pensamiento
Una imagen de las dos
Jugando a pasar el tiempo.
Que Dios os de mucha suerte
Y pronto podáis decir
Que se ha abierto un horizonte
Que presagia un “Potosí”.
Juan José Rojo Martínez
Mayo 2005
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